miércoles, 23 de mayo de 2007

Premio LA JICARA


Recuerdo que cuando estudiaba la primaria, era costumbre de la directora al comenzar su discurso semanal pronunciara la frase “Honor a quien honor merece”. Creí que solo las repetiría para hacerle burla enfrente de mis pequeños compañeros de estudio, pero el día de hoy me di cuenta que era necesario decírselas a un hombre.
Don Pedro Sierra Ramírez es el nombre de esta gran figura, aunque desconocida para muchos, es un gran ejemplo para los que tenemos el agrado de conocer su historia.
El señor Pedro más conocido como “don Pedrito”, cuenta con 77 años de edad y a lo largo de su vida a destacado en Atletismo y Danzón, sus dos grandes pasiones que hicieron que siempre tuviera ese espíritu de lucha, disciplina y perseverancia.
A los 6 años de edad, mientras cursaba la primaria, en la escuela Centro Escolar Revolución en la ciudad de México, se intereso mucho por la natación. Ahí practicaba y ahí perfecciono sus habilidades, las cuales lo convirtieron en héroe a los 10 años cuando sin dudarlo se lanzo al agua para salvar a una señorita que se estaba ahogando en el puerto de Veracruz, el cuenta que no fue fácil pero la satisfacción de ayudar fue lo que lo motivo a llevar a cabo esa heroica acción, no salio en la tele, ni en periódicos, ni revistas, pero para el fue suficiente la gratitud que tuvo la familia con el.
La secundaria la estudio en la escuela Antonio Caso en Morelos en donde fue seleccionado en natación, básquetbol, box, fútbol, béisbol, softbol. Aunque no destaco en todas, cada una les dejo grandes experiencias.
Una de las más grandes fue a los 15 años cuando en el boxeo logro ganar 18 de 19 peleas y todas por nocaut.
Posteriormente, a lado de su padre Don Pedro Sierra Hernández aprendió el manejo de escopetas calibres 10 y 12, rifles calibres 22 y pistolas calibres 45, esto lo llevó a colocarse como subcampeón de tiro cuando era conscripto de 50, 100 y 200 metros de rodilla, de pie y pecho tierra.
Su trayectoria de bailarín comienza a lado de la maestra Aída Carro quien le enseño los diferentes ritmos de aquella época, destacando mas en el que es su pasión el Danzón.
Hoy en día don Pedrito no pierde esa pasión de vivir y sigue acumulando logros y victorias en su vida, el nos dice que hay tres grandes cosas que un hombre debe hacer en su vida y es: Sembrar un árbol, escribir un libro y levantar una casa.
Aunque este gran hombre no nació en Tabasco el se siente muy choco y es para el un gran orgullo compartir con nosotros su vida, que es un gran ejemplo para los jóvenes.
Por estos motivos este miércoles 23 de mayo de 2007, en la División Académica de Ciencias Sociales y Humanidades (DACSyH) se le dio el premio a La Jícara, por su gran vida.
Agradezco a mis amigos Julio Cesar Priego Almeida y Juan Pablo Frías Álvarez, me compartieran el testimonio de vida de este buen hombre, para que de la misma forma yo lo pudiera compartir con ustedes.
No importa en que lugar quedemos lo importante es correr hasta la meta.